Se puede hacer un montón de música sin que esté escrita, esto no es ninguna novedad.

• ¿Quién no ha cantado o tocado algo aprendido «de oído», por imitación?
• ¿Y qué pasa cuando se está creando música «nueva», por ejemplo improvisando?

La música por transmisión oral existió muchísimo antes que la música escrita. Además, no es nada raro aprender a tocar y cantar sin saber leer y escribir música, igual que pasa en la infancia cuando se aprende a hablar. Entonces, ¿de verdad necesito saber leer música?

¿Qué nos aporta aprender a leer música con la guitarra?

Si estás interesad@ en este artículo seguramente sea porque alguna vez te has sentido limitad@ por no entender la música escrita. Pero no te preocupes: estás en el sitio adecuado. Saber interpretar el lenguaje escrito de la música te dará acceso a un montón de nuevas posibilidades; algunas de ellas ni las habrás imaginado y las irás descubriendo por el camino.

¡Vamos allá!

Partituras para guitarra en pentagrama, tablatura, diagramas y cifrados de acordes

En guitarra es habitual encontrarnos material escrito en todas estas formas. Cada una tiene su función y todas se utilizan desde muy antiguo. Incluso las tablaturas, tan extendidas en internet, ya se usaban en época medieval. 

La partitura en pentagrama es la forma universal de escribir música porque tiene la gran ventaja de que sirve para cualquier instrumento. En este artículo me centraré en este sistema y más adelante, en alguna otra ocasión, ya hablaremos de cómo leer tabs o tablaturas de guitarra, y de cómo leer acordes.

Las notas en el pentagrama

El pentagrama no es nada más que 5 líneas paralelas horizontales. Una nota musical se representa con un pequeño círculo sobre el pentagrama, y se puede situar en una de las líneas o en uno de los espacios entre líneas. Esto da lugar a las distintas alturas de nota: do, re, mi, fa, etc…

La clave de sol

Según si los instrumentos tienen un registro de notas más grave o más agudo, al inicio del pentagrama se coloca una clave distinta. Para la guitarra, y para buena parte de los instrumentos “agudos”, la clave utilizada es la clave de sol. En cambio, en los instrumentos más graves como el bajo se utiliza otra de diferente, la clave de fa.

Cuando el pentagrama está en clave de sol, la nota sol se representa justo en la segunda línea empezando por abajo. Como truco para recordarlo puedes fijarte en que al dibujar la clave de sol, se empieza alrededor de la segunda línea. 

A partir de esta nota sol se pueden deducir el resto de notas. Sólo necesitas saberlas por orden de grave a aguda: do re mi fa sol la si do. También es útil saberlas al revés: do si la sol fa mi re do. 

En el siguiente gráfico puedes ver las notas escritas. Te darás cuenta que cuando una nota está sobre línea, la siguiente está entre líneas; y la siguiente otra vez sobre línea, etc… ¿No es tan difícil como parece, verdad?

La nota do de abajo está fuera del pentagrama, y por eso necesitamos una línea adicional que atraviese la nota; así no se confunde con un re.

¿Cómo se tocan las notas en la guitarra?

Una vez sabes diferenciar las notas en el pentagrama ya tienes una parte del trabajo hecho. Pero te falta algo importante: aprender a tocar esas notas en tu instrumento. Para ayudarte con esto voy a usar un diagrama del mástil de la guitarra.

Si no lo acabas de entender es normal. Te recomiendo que visites el curso No sé leer partituras y quiero aprender de Entre Trastes, mi escuela online de guitarra eléctrica. La primera lección del curso, titulada Escala de do mayor, está en abierto y se puede ver incluso sin estar suscrito a la escuela. Precisamente en esa lección explico esto y muchas de las cosas de las que te hablo a continuación.

Una aclaración: Las notas en la guitarra eléctrica, en la guitarra clásica o española, y en la guitarra acústica, se sitúan en el mismo lugar. Como norma general, afinamos todas las guitarras de igual manera.

Figuras rítmicas o duración de las notas

Ya eres capaz de leer y tocar en la guitarra las distintas alturas de las notas de una partitura. Esto es un gran paso, pero ahora nos faltan las matemáticas de la música. ¡Que no cunda el pánico! 

La duración de las notas, es decir el ritmo, es más importante de lo que parece. Si no se tiene en cuenta, puede ocurrir que una melodía, que es un conjunto de notas encadenadas, sea del todo irreconocible.

De momento veremos estas 3 figuras rítmicas: 

• Una nota con una duración entera, sin acortar, se representa con el círculo sin rellenar, y se la llama redonda. 
• La figura que dura la mitad de la redonda es la blanca. Por lo tanto tocar dos notas con valor de blanca seguidas durará lo mismo que una sola nota con valor de redonda.
• La figura que dura la cuarta parte de la redonda es la negra. O sea que tocar dos notas de negra seguidas durará lo mismo que una sola nota de blanca. Y tocar cuatro notas de negra, será lo mismo que tocar una sola nota redonda.

El tempo

Para tocar de forma correcta los valores rítmicos de las notas, necesitamos establecer la velocidad o pulsación que tendrá esa música en concreto. El pulso en música, igual que ocurre con el de nuestro corazón, se mantiene de una manera constante y regular. 

Esta velocidad en la pulsación, también llamada tempo, se mantiene estable en toda una pieza. Al empezar otra pieza, como seguramente tendrá un carácter distinto, sí que cambia el tempo. Por poner un caso, en un rock n’ roll la pulsación será mucho más rápida que en una balada.

El valor de duración de las notas debe estar en relación con los pulsos. Y como lo habitual es que el valor de negra equivalga a un pulso, si tocamos notas seguidas a ritmo de negras estaremos siguiendo exactamente la pulsación.

La indicación del compás

Si pruebas de ir siguiendo la pulsación mientras escuchas cualquier pieza musical, golpeando el suelo con el pie por ejemplo, te darás cuenta que de manera consecutiva hay unas pulsaciones o tiempos que parecen más importantes que otros. Es como si sonaran más fuerte. Y además se repiten cíclicamente casi siempre cada 4 tiempos; aunque a veces también pasa cada 3 tiempos, cada 2, cada 6, cada 5, etc… Esto es lo que conocemos como compás.

En el pentagrama el compás se indica con un número al lado de la clave. Este número acostumbra a ser una fracción. El número superior de esa fracción indica los tiempos del compás para esa pieza musical.

A lo largo del pentagrama también se sitúan unas líneas divisorias verticales, las líneas de compás, que sirven para separar visualmente los 4 tiempos del compás, o 3, 2, 6, 5, … según el caso. 

La suma de las figuras rítmicas en cada compás tiene que dar los tiempos que éste ha de tener. Miremos el pentagrama siguiente que está a compás de 4 tiempos. Si tal como te he dicho cada tiempo equivale a una negra, podrá tener 4 negras. Pero también puede estar ocupado por sus figuras equivalentes: 1 sola redonda; o 2 blancas; o bien una combinación entre 1 blanca y 2 negras.

Descárgate una partitura en PDF compuesta para aprender a leer con la guitarra

Ahora yo creo que lo que necesitas es poner en práctica toda esta teoría, y otra vez te vuelvo a dirigir al curso No sé leer partituras y quiero aprender. La primera lección que te comentaba antes contiene una partitura ideal para iniciarse. Está en formato PDF y la puedes descargar gratis. Además, en el video de la lección te voy dando todas las indicaciones para que puedas acabarla tocando con éxito; incluso encontrarás un enlace para divertirte tocando la partitura encima de una base de acompañamiento.

¡Disfruta de tu aprendizaje, y nos vemos muy pronto!